miércoles, 24 de enero de 2007

Curtis en estado "Catatónico"




Antes de iniciar estos comentarios, mas vale ser sincero. Cuando empecé a diseñar este blog dedicado al cine me dije a mi mismo, “mismo, abriré este espacio comentando una de mis películas favoritas”. Esa película favorita no era otra que la segunda entrega de James Bond “De Rusia con Amor” del año 1963, una de las mejores películas de la saga, con Sean Connery como el agente.

Casi un mes después sucedió algo inesperado por el público, los fans y la crítica. Ya es muy común ver en supermercados o en tiendas, canastos grandes atiborrados de películas en DVD a bajo precio tan apiñadas y en lotes tan grandes, que no se caen...se rebalsan!. Así, el pobre cinéfilo que quiere escudriñar buscando algún título que le parezca “bonito”, debe llamar al Calypso capitaneado por el mismísimo Jacques Cousteau con el fin de sumergirse en las profundidades de un mar de carátulas con la esperanza de llevarse un pez gordo.

Por suerte no tuve que llamar al Calypso para encontrar el título con el que abriré este blog. Este flotaba en la superficie, como queriendo ser encontrado y comprado, entienden...me estaba llamando (vieron Superman con la volaita del cristal verde me imagino). En fin, luego de casi dos horas de película, creo que dejaré al sofisticado 007 para otra ocasión y me tomaré el vodka martini yo solo mientras escribo este comentario.


Primero, los datos técnicos

Titulo: El Estrangulador de Boston (The Boston Strangler).
Año: 1968.
Director: Richard Fleischer.
Productora: 20th Century Fox.
Intérpretes: Tony Curtis, Henry Fonda, George Kennedy.

Digamos que esta cinta es una de las pioneras en el genero “asesinos en serie, una historia de la vida real”. Sin embargo me parece que la etiqueta queda muy chica para una película llena de elementos propios de un filme policial, documental y de thriller psicológico.

Que tal una reseña. “El Estrangulador de Boston”, está basada en la vida y obra de Albert Desalvo, un tipo que se ganaba la vida y la de su familia limpiando calderas allá por los lejanos años sesenta. Un cariñoso padre de familia, buen esposo, un ciudadano común y corriente...salvo por un pequeño tornillo suelto en su cabeza que lo llevó entre 1960 y 1964 a asesinar a cerca de 13 mujeres, de todas las edades, colores, olores etc.
Durante ese período, Desalvo mantuvo en alerta no sólo a Boston mismo, sino que a los demás distritos aledaños (Cambridge por ejemplo), debiendo crearse en la policía un “Departamento de Estrangulamiento” dedicado exclusivamente a detener a un hombre cuya identidad se ignoraba, que se presumía era un maniático sexual, que estrangulaba a sus victimas pero que también las golpeaba y mutilaba, etc. Tengan eso como pequeña reseña no sólo de la película, sino también de los sucesos verídicos.



Ahora, según lo que entendí, revisaré la película dividiéndola en dos. La primera parte es un filme policial. Unos cuantos tipos vestidos de uniforme policial, departamentos con “olor a escena del crimen”, investigadores con gabardinas y sombreros, cadáveres que esconden la cara y muchos elementos mas.
El toque majestuoso, el truco de meter dos o mas cuadros en una escena es bastante efectivo. Partimos siendo testigos de dos situaciones al parecer inconexas. Dos personas se encuentran a la salida de sus respectivos departamentos criticando a la municipalidad y a la vida cotidiana en general.
Al lado de ese cuadro vemos otro que parece ser un departamento contiguo del mismo edificio el cual sólo deja sombras y oscuridad, pero de todas maneras el observador es capaz de tomar nota sobre un extraño bulto que destaca en el horizonte oscuro. Mientras tanto las inquilinas siguen conversando, hasta que por alguna razón se dirigen al departamento contiguo para despertar a su “amiga”. El otro cuadro sigue en penumbras y el bulto no se mueve. Dos toques y dos llamados en el otro cuadro, las inquilinas deciden entrar y comienzan a abrir la puerta. La luz empieza a aflorar en el otro cuadro y de sombras pasamos a detalles, ya no parece ser un bulto, mas bien piernas de mujer. Finalmente ambos cuadros se conectan en el umbral de la puerta, quedando para el espectador el recuerdo de dos semblantes petrificados por el espanto y el pavor.



El mismo truco parece funcionar si queremos convertir el filme en un documental. Varios cuadros se van multiplicando en la pantalla acompañados del sentimiento de inseguridad, miedo, pánico y horror de los “bostonianos”. El misterioso estrangulador ha cometido una de sus peores fechorías: concentrar la ciudad de Boston, el pánico y el horror dentro de una pantalla, y en una sola escena.

Antes de terminar esta primera parte, una mirada al reparto. George Kennedy muy sobrio y convincente en su actuación (ya me había acostumbrado a mirarlo como el compañero del torpe Frank Drebin en la saga de “Y donde está el policía?”), acá saca a relucir un personaje sacado de cualquier “film noir” de los años 30’ dedicado a capturar a un asesino sacado de la vida real. Es como si el gobierno de Chile hubiera traído a Humphrey Bogart o a James Cagney para resolver los crímenes de Alto Hospicio.
Henry Fonda sin duda pone la pausa y la actitud, algo bien a la Henry Fonda. Me acostumbré a ello desde “La Guerra y la Paz” cuando salía filosofando impávido acerca de la humanidad y la inmortalidad del cangrejo mientras Napoleón le tiraba balas de cañón a su Moscú. De todas maneras no deja de ser meritorio el toque de “experiencia” en el personaje de Fonda.

La victima número 10 marca el final de la película como un filme policial y de esta parte del comentario.



La segunda parte del filme no tiene título, tiene nombre y apellido...TONY CURTIS. Hasta la aparición de su silueta sentada en un sillón frente a la TV llorando el funeral de JFK, no tenemos idea quien podría ser el autor de tan horrendos crímenes, incluso cuando la policía ha barrido la ciudad deteniendo a pervertidos, mirones, manoseadores de metro, acosadores telefónicos, acosadores de cine y análogos.

En el minuto en que vemos a Desalvo, nos parece que hay algo mas en este filme aparte de policías y asesinos. Nuestro anfitrión Curtis será el encargado de introducirnos a la galería Desalvo, cuya existencia (como se verá mas adelante para quienes vean la cinta) hasta el mismo Desalvo desconoce.


Amigos, quisiera comunicarles que en este minuto estamos atrapados y no hay manera de salir sino es llegando al final de esta galería. Estamos rodeados por cuatro paredes blancas y brillantes, un espejo, una mesa, una grabadora sesentera, un micrófono sesentero y dos sillas. En una silla el Fiscal investigador Bottomly (Fonda), y en el otro asiento, Desalvo.

Lo que parece un típico interrogatorio policial se convierte en el examen freudiano a un subconsciente confundido en recuerdos y lagunas. No es un interrogatorio, es Desalvo conociendo a Desalvo, siendo el personaje de Fonda una especie de Virgilio conduciendo a un confundido Dante hacia rincones perdidos de su propio infierno. Hasta aquí seguiremos atrapados en su mundo, viviendo cada momento perdido, cada segmento bloqueado hasta que al igual que Desalvo, nos enfrentemos a nuestra propia verdad.
El número dos parece repetirse, una película de dos partes, un sujeto con dos personalidades, dos verdades.



Sin duda que el final de esta galería marca el desenlace de esta historia, en un abrupto y “catatónico” espacio vacío, donde nos miramos cara a cara con Desalvo y nos convertimos en prisioneros de nuestra verdad y nuestras culpas. Cuando miren a los ojos de Desalvo mastiquen el silencio y sientan los ecos clavados en blancas paredes, puede que oigan sus respectivos nombres clamando en el vacío, pero cuidado...es sólo una película!!.

Para el final, un par de datos freak:

1- Desalvo no fue acusado por los estrangulamientos, pero quedó recluido en una cárcel de Massachussets, En 1973 murió apuñalado.
2- Una de las victimas del estrangulador es interpretada por Sally Kellerman, quien en los 80’ encarna a la profesora de literatura de quien Torton Melon se enamora en “De vuelta al Colegio”.
3- Mención especial a la banda sonora de la película...no tiene!!.

No se si se quedaron dormidos con mi comentario, pero si ven la película me siento cumplido.

Si gustan, pueden mandar sugerencias, comentarios, opiniones, posteos, datos freaks, mensajes obscenos, pitanzas, etc. Nos vemos el siguiente comentario.

Sonámbulo Cesare

(Gracias Carolillo por el impulso)

5 comentarios:

Anónimo dijo...

wena broder! bienvenido a este mundillo. Es menos voyero que el fotolog, así que está mejor.
Muy buena la reseña, me dieron ganas de buscar la peli la cual no cachaba pa ná.....
ahora le queda escribir otra reseña, una pa aqviles.. eh?

un abrazo,
Diego

Caro dijo...

Guau! tremendo análisis!! No cachaba la peli ni en pintura (así es que no puedo aportar con ningún dato freak, consejo de la abuelita, ni copucha de la vecina), pero me tincó verla quizá por esa cosa media obsena del asesino en serie, jaja.
Acá tb hay de esos canastos gigantes con pelis y el otro día me compré.... cha cha cha chan.... los cazafantasmas I !!! todavía no la veo eso sí.
Y fui al cine hace poco y vi Apocallipto de Mel Gibson, sin tener ni una idea de qué se trataba. De hecho me invitaron y fue como "okeeeey, a los buenos títulos" y me imaginé cualquier cuestión onda una mala peli de terror, jaja, lejos de eso. Me gustó bastante te diré.
Ya, esperamos la siguiente reseña estética-analítica-poética-infundibuliforme de este blog.
Congratulations! y nos encontramos en la blogósfera.

Caro dijo...

Muy fácil mi querido Watson:
vas a la página
http://www.radioblogclub.com/
en el buscador escribes la canción o la banda que quieres, te aparecerá una lista de canciones, haces clic enm el signo play (en azul) de la que te gusta y a la derecha te aparecerá un recuadro para elegir los colores de tu reproductos, cuando los hayas elegido copias el código que hay abajito y ese lo pegas en tu blog.
Cómo se pega en el blog? vas a diseño, planilla o layout (si es que lo tienes en ingles) y eliges "agregar un nuevo elemento" (a la derecha)te va a salir un listado de posibilidades, entonces seleccionas la que dice Java-HTML y se te abrirá una ventanita, escribes un título, onda "mis canciones cebollentas" y pegas el código de la canción. Ahí mismo vas pegando los códigos de otras canciones.
Tb el código lo puedes pegar en un post, para eso cuando estás escribiendo el post haces clic en la pestaña que dice HTML y lo pegas y listo.

Hay un par de artículos que escribí en mouse por si quieres aprender a poner más cosillas, son:
http://www.mouse.cl/2006/guiaweb/12/15/index.asp
y
http://www.mouse.cl/2006/guiaweb/11/14/index.asp
Suerte!!

Anónimo dijo...

Viste que era fácil y bonito??, jaja
me da susto tu música eso sí!! y a eso le agregas el autorretrato que te hiciste.... y ya se hizo de noche... CUCOOOOOOO!!!.
Ahora iré a enchufar mi espantacuco para poder dormir tranquila esta noche.

Lo felicito, ud ha entrado de lleno a la blogósfera!!.

Anónimo dijo...

A propósito de paltas y de actitudes infundíbuliformes, el comentario siguiente no es de cine, es de música y, ni siquiera es de música, es de medio ambiente cultural, pero tampoco es eso; es de papel perforado que se tira al aire y que nadie recoge porque no vale la pena, es sobre morralla... cosas inútiles y sin valor; es sobre malas películas de terror; es, finalmente, una réplica exacta de lo que dije en el blog de AQVILES y ahí te va:
"A nadie debiera extrañarle la actitud prepotente y cabrona de los que tienen "poder"; sean estos momios o concertacionistas y, si son pendejos... peor porque la inexperiencia los vuelve soberbios. Esto lo aprendimos de la dictadura y se replicará indefinidamente, porque fue inoculado profundamente en el alma del chileno.
Yo, en el lugar de ustedes, si estoy en el escenario, no hago caso de las indicaciones de cortar de nadie y menos de un chanta que no está acreditado como organizador. Me gané el derecho de subir y presentar mi propuesta: nadie tiene derecho a cortarme... tendrán que bajarme a patadas... Si el problema persiste, tomo el micrófono y denuncio la situación y convoco a plebiscito... el público decide... seguimos con nuestra tocata o nos vamos?
Si me cortan el audio, lo digo a gritos... un cumpleaños de monos no le viene mal a nadie de vez en cuando. O ustedes creen que eso les cerrará las puertas de otros escenarios... Ná... los valientes derriban muros.
Y otra cosa, Rodrigo, no vuelvan a cederle el espacio a nadie... no pidas solidaridad y consideración a nadie... los espacios no se ceden, se ganan. El ego del "artista", es tan básico como el del político... con tal de figurar, no importa si hay que pisar cabezas".

Un abrazo de Rodrigo Lillo (que en dictadura dijo cosas en el escenario).